Nueve formas originales de doblar servilletas

La servilleta es un elemento indispensable en una mesa, especialmente si hablamos de espacios de restauración. Pero, además de una pieza útil y funcional, es un accesorio de decoración muy versátil , capaz de dar un aire nuevo a la mesa e, incluso, de tematizarla. Doblar servilletas de forma que sorrendan a los comensales es todo un arte, pero un arte que puede aprender con un poco de práctica. 

A juzgar por videos como el que sigue, en el que se dobla una servilleta con forma de árbol de Navidad en menos de un minuto, no parece tan complicado, ¿no?

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Una historia con el sello Da Vinci

La servilleta no siempre fue un básico en las mesas, y las historias sobre su origen son de lo más variado. Si bien en el imperio romano ya se empleaban telas con el fin de limpiarse, eran los propios invitados quienes llevaban ; en otras ocasiones, en cambio, se empleaba el mantel como servilleta.

Pero, en la historia más moderna -o, al menos, solo cinco siglos atrás-, la invención de la servilleta e atribuye nada menos que a Leonardo Da Vinci . Cuenta la (casi) leyenda que el artista solía trabajar como maestro de festejos para Ludovico, señor de Milán, quien tenía por costumbre atar conejos a las sillas para los invitados limpios sus dedos en el pelaje de los animales.

Da Vinci, para terminar con esto, ideó que cada comensal se le entregase un paño para que limpiase sus manos y su cuchillo . Si bien la idea del artista universal parecía no calar entonces, décadas después se asentó entre la nobleza, que comenzó colocando las servilletas en los hombros.

Otras historias sitúan como inventor de la servilleta al duque galo Jaques de Serviliet , quien abrió un restaurante tras la Revolución Francesa y comenzó a envolver los cubiertos en un trozo de tela que podría emplearse, también, para limpiar las manos.

Desde entonces, el uso y colocación de las servilletas ha ido evolucionando y adquiriendo incluso un cariz artístico , como prueba el doblaje de servilletas con esta forma de flor.

El protocolo de la servilleta

Sea como fuere su origen, las servilletas son hoy un indispensable en restaurantes y bares. Y, como el resto de los utensilios de la mesa, guardan sus propias normas de protocolo , especialmente relevantes en restaurantes y otros complejos hosteleros.

La primera duda que puede surgir es dónde colocar la servilleta . El protocolo indica que puede ser tanto más del plato como en los laterales, posiblemente el derecho, pues la mayor parte de las ventas suelen ser diestros. Nunca deben colocarse en el interior de las copas o vasos o en el espacio entre copas y platos. 

Las normas protocolarias indican, además, las servilletas de papel deben desterrarse a las fiestas infantiles , los picnics, las barbacoas o las ocasiones muy informales. Para todo lo demás, servilletas de tela, con las que se puede dar rienda suelta a la creatividad y presentarlas con forma, por ejemplo, de corazón.

En el caso de que lleven un bordado , ya sea el logotipo del restaurante o el de la institución que ha contratado el servicio, este debe quedar a la vista  y ocupar la parte central de la servilleta, sea cual sea su disposición. 

Además, en ocasiones formales (lo que incluye los lugares de restauración), las servilletas no se deben identificar con servilleteros, lo que queda reservado al ámbito familiar e informal. Eso sí, está aceptado identificarlas con alfileres : esta tendencia comenzó porque las servilletas, en los vestidos de seda y otros tejidos, solían resbalar, lo que llevan las ventas a tener que agacharse. Para evitarlo, el protocolo permite que se sujeten con un alfiler, que los invitados pueden guardar como recuerdo de la celebración o el restaurante.

¿Qué dice el protocolo sobre doblar servilletas? En principio, debe permanecer para ocasiones informales o temáticas, aunque se abre la puerta a decorar la mesa con ellas dobladas de forma original o acorde con la comida o cena que vaya a servirse. Una opción elegante, sencilla de ejecutar y apta para todas las ocasiones es doblarlas con forma de abanico.

El arte de doblar servilletas

Doblar servilletas requiere de cierta práctica y destreza, algo que también se puede aprender. Saber colocarlas de distintas formas es, para los hosteleros y restauradores, un excelente recurso para llenar de vida sus mesas .

Que hay que actuar con precisión casi milimétrica al doblar servilletas bien lo sabe la artista japonesa Yuki , nuestras doblesces y diseños protagonizan los videos de este artículo. Los principios del origami, ese arte japonés que transforma el papel en piezas específicas, con formas de animales, flores y objetos, son perfectamente válidos para esta tarea.

Saber qué movimientos realizar, seguir las instrucciones y practicar para las formas queden cada vez más definidas son puntos fundamentales para servilletas como maestro del origami y obtener resultados tan llamativos y vistosos como esta rosa de tela.

Consejos prácticos para doblar servilletas

El protocolo recomienda utilizar servilletas cuadradas de 60 centímetros de lado  para ocasiones formales. Esa medida -y un grosor intermedio, pero con consistencia-, también, idónea para doblar servilletas con formas como las sugeridas por la japonesa Yuki, que trabaja como traductora y profesora de japonés en España y que comenzó con esta práctica al llegar al país hace seis años. Además, para que sea más fácil trabajar y darles forma de lirios como estos, se recomienda que estén recién lavados, planchadas y suavemente almidonadas.

Con la servilleta lista, en una superficie plana se comienza a doblarla, según las instrucciones para la forma que se quiera conseguir. Desde un árbol de Navidad para las fechas que se aproximan, y que llenarán los comedores de los restaurantes de celebraciones, hasta unos simpáticos conejos, que encandilarán a los más pequeños, el abanico de opciones es amplísimo.

Doblar servilletas puede ser también un recurso adecuado para presentar los cubiertos a los comensales, como muestra este ejemplo en forma de teja. Además, es una de las figuras más sencillas de crear, perfecta para los menos mañosos o quienes disponen de poco tiempo.

En esa misma línea, otra opción elegante, pero discreta y sencilla para presentar los cubiertos a los comensales es en forma de cama o de sobre. Apta para todos los gustos y versátil, pues se puede colocar tanto encima del plato como en un lateral.

Por último, es importante tener en cuenta otras dos cuestiones: el tipo de tela y el color de servilleta que se elige. Si se compra el menaje al por mayor, los proveedores de utensilios de cocina y mesa contarán con un amplio abanico de telas y tonalidades para las servilletas. 

Respecto al color, la norma clásica dicta seleccionar el mismo que el del mantel. Pero, en caso de duda, el minimalismo suele ser una opción ganada. Respecto al tipo de tela, el damasco es la elegida para las ocasiones más formales , pero el lino, la tela batista o el algodón son bien apreciadas entre comensales y expertos.