Modalidades de contrato para reforzar la plantilla en Navidad

La campaña navideña en hostelería está íntimamente asociada a las cenas de empresa, los banquetes familiares, las veladas con amigos y los caterings de etiqueta. Todos estos eventos tienen en común, además del cotillón, que son ocasiones especiales, y como tales, conllevan unas exigencias de calidad extraordinariamente altas. Un reto que pide a gritos personal de apoyo.

Hacer frente a la temporada más señalada del año no es, por tanto, una simple cuestión de carga de trabajo. El servicio tiene que dar la talla en todos los aspectos, pues el cliente demanda una experiencia a la altura de la fecha. Esta es la consideración principal que hemos de tener presente a la hora de abordar la contratación de empleados de refuerzo para este período.

Tipo de contrato

Festividades como Nochebuena, Nochevieja, el día de Reyes o el puente de diciembre propulsan la actividad en hostelería al máximo, lo que obliga a reforzar las plantillas con personal interino.

Al tratarse de refuerzos laborales restringidos al período de pico de actividad, la inmensa mayoría de puestos de trabajo creados durante las fiestas se cubren con contratos temporales. La modalidad más conocida para estos casos es la de obra y servicio, pero hay otras opciones a explorar.

Contrato eventual por circunstancias en la producción

En este ámbito, el empleador cuenta con un formato ajustado a estas necesidades: el contrato eventual por circunstancias en la producción.

Según el artículo 15 del Estatuto de los Trabajadores, este tipo de vinculación podrá tener lugar “cuando las circunstancias del mercado, acumulación de tareas o exceso de pedidos así lo exigieran, aun tratándose de la actividad normal de la empresa”.

Esta normativa fija su duración máxima en seis meses, aunque podrá prolongarse si así lo establece el convenio. Asimismo, el trabajador sujeto a este contrato deberá incorporarse dentro de los doce meses siguientes al momento en que se produjeron las circunstancias especiales de mercado; en este caso, el aumento de carga de trabajo por la temporada navideña (aunque, como es obvio, es en esas mismas fechas cuando necesitaremos los refuerzos).

Suena a perogrullo, pero conviene recalcar que el contrato tiene que formalizarse por escrito, detallando la duración del mismo, las causas que lo motivan y las condiciones a las que están sujetas las horas extraordinarias. Así nos ahorramos el riesgo de un fraude de ley, con lo que el trabajador pasaría automáticamente a ser indefinido.

Contrato fijo discontinuo

Hay cierta polémica en torno al contrato eventual por circunstancias en la producción, ya que las fiestas navideñas se celebran todos los años, con lo que se pueda decir que el aumento del volumen de trabajo sea algo imprevisible, según opinan varias voces en el ámbito jurídico.

En este sentido, aquí entra en juego la figura del contrato fijo-discontinuo, definido en el artículo 16 del Estatuto de los Trabajadores. Esta modalidad es útil para aquellos puestos que es necesario cubrir de manera intermitente en varias épocas del año, como en la hostelería es la Navidad.

Esta forma de relación laboral es especialmente útil para recurrir a los trabajadores de refuerzo que ya conocemos y han rendido bien en el pasado. Rige la exigencia de formalizarlo por escrito indicando la duración estimada de la actividad, la forma y orden de incorporación, la jornada laboral estimada y su distribución horaria.

Personal

Tomando en cuenta la ubicación de tu local, deberás organizar la llegada de los refuerzos en una fecha u otra. Si se encuentra en una localidad turística, es posible que el mayor pico de actividad de las fiestas se produzca durante el puente de diciembre, a comienzos de mes.

En cuanto a los perfiles, y dependiendo del enfoque de tu negocio y de tu presupuesto, son varias las áreas que tienes que blindar:

• Camareros de sala:

  para agilizar el servicio y asegurar la rapidez

• Ayudantes de cocina y empleados:

  que organicen bien el reparto de tareas

• Cocineros:

  que refuercen el trabajo en los fogones

• Personal de barra:

  experimentado y versado en la preparación de cócteles o combinados

• Recepcionistas y personal de apoyo

• Servicio de limpieza

No olvides que, para salir airoso del maremagnum navideño, no basta solo con la fuerza del número. Como ya se ha dicho, la llave del éxito en estas fechas está en la calidad, y para conseguirla necesitarás empleados solventes, motivados, comprometidos y resistentes al estrés y a la presión. Asegúrate de rastrear estas cualidades durante la búsqueda o, como se dice en términos futbolísticos, el scouting.

Un trabajador eventual que cumpla con esos requisitos es un bien que se ha de cuidar, aunque solo vaya a estar en el negocio durante un tiempo limitado. Es mucho lo que puedes hacer para que esta persona se identifique con el proyecto:

Sé transparente con las condiciones y proactivo a la hora de resolver dudas.

Establece incentivos y no seas parco a la hora de reconocer el esfuerzo y la buena labor.

Remarca que tienen las mismas oportunidades de progresar en la empresa que los trabajadores fijos, en el caso de que surjan vacantes.