Qué es un food court y cómo funciona este modelo
Conoce las características de esta fórmula de restauración
Como hemos señalado en otras ocasiones, la hostelería y la restauración forman un sector inmenso, en el que conviven muchos y variados modelos de negocio que tienen algo en común: poner a disposición del cliente comida y/o bebida servida, en uno u otro formato, a cambio del pago de un precio. Después, la ecuación varía, concretándose en en un tipo de negocio u otro.
En este artículo vamos a tratar el concepto de “food court”, que cubre la función de agrupar varios negocios en un mismo espacio. Veamos qué es y cómo funciona este modelo.
Qué es un food court
Este concepto que tomamos del inglés encontraría su equivalente en español o su traducción en “zona de restauración” o, si traducimos literalmente del inglés, como “patio de comidas”. Un food court reúne un número indeterminado de negocios que dan servicio a sus clientes conviviendo en una misma zona o área, de manera organizada, tanto a nivel de negocio como de infraestructuras.
Este es un espacio que normalmente se encuentra dentro de otro espacio superior y cerrado (habitualmente en centros comerciales, estaciones de tren o autobús, aeropuertos, algunos centros educativos, como universidades, etc.), aunque también puede estar al aire libre y que agrupa diferentes negocios hosteleros y de restauración.
Puede tener zonas comunes compartidas para degustar o con zonas del equivalente a una “terraza” en el caso de cada uno de los negocios que lo componen.
Características de un food court: ¿qué lo diferencia de otros tipos de negocio?
- En primer lugar, es un punto de reunión en el que se dan cita diferentes ofertas que compiten entre sí, pero comparten un marco espacial y temporal, ya que normalmente darán servicio en las mismas franjas horarias.
- Esos mismos competidores podrían, potencialmente, trazar alianzas que les permitan reducir determinados costes (posibilidad de compartir gastos) y atraer clientes (si hacen marketing conjunto para que el cliente acuda al food court).
- En este caso, su público objetivo acude al mismo sitio, ese “patio”, y después elige en qué negocio consumir. Sería el equivalente a una calle llena de restaurantes en la que, hasta el último momento, la decisión de compra puede variar.
- En un mismo espacio conviven muchos tipos de ofertas gastronómicas, pudiendo haber especialistas en diferentes cocinas y de bebidas.
- El cliente de este modelo de negocio puede elegir comer y beber combinando opciones que le ofrezcan diferentes restauradores dentro del food court. Por ejemplo, unos tacos mexicanos de un quiosco, un zumo natural de otro y un helado de otro diferente.
- Puede haber recursos compartidos por varios negocios y, así vez, por los clientes. Por ejemplo, los baños del centro comercial, aeropuerto o estación en la que se encuentre, la zona que se disponga para comer y beber, las mesas y sillas, papeleras u otros.
- En el food court comen y beben clientes de negocios distintos, por lo que siempre habrá cierta proximidad entre ellos, llegando incluso a compartir la zona de mesas y sillas destinada al momento de degustación de aquello que han adquirido.
¿Cómo funciona un food court?
Dada esta convivencia de distintos negocios en un mismo espacio que caracteriza al food court, una de las claves de su funcionamiento es comprenderlo como una zona compartida en la que varios establecimientos hacen uso de una parte de recursos comunes y otra parte de recursos propios, de cada negocio.
En este caso, para los restauradores y hosteleros que ocupen un establecimiento dentro de esa zona, una de las ventajas es el acceso a un local equipado, que ya se entrega con todos los servicios instalados (agua o luz, por ejemplo).
Además, una parte de limpieza de zonas comunes (terraza, mesas, sillas…) que asume el espacio en el que se encuentre o que pueden repartirse entre los distintos operadores que exploten los negocios, planteando una bajada en los gastos que otro tipo de modelo de negocio no puede eliminar o reducir.
De salida, la forma en que se distribuyen los locales depende de la ubicación y de su diseño, pero siempre hay un elemento de cercanía, de proximidad entre ellos, entre sus clientes y también entre ellos y la zona destinada a comer y beber que ocuparán estos.
Entre esos negocios que componen el food court puede haber algunos que sean franquicias, marcas conocidas, y otros ser pequeños negocios que no tengan otro local en otra ubicación, pero otra ventaja es que tanto unos como otros se encontrarán instalados en zonas de paso, de afluencia, en las que captar clientes.
A la hora de efectuar la compra, o el momento de consumo, el cliente que acude a un food court decide dónde va a comprar (ya sea bebida, comida o ambos), y acude a ese quiosco o establecimiento, que tendrá un mostrador para dar servicio, y en él pide, realiza su comanda y paga. Tiene la opción, además, de elegir platos o elaboraciones de distintos establecimientos y combinarlos a su antojo.
Una vez se le entregue su pedido, acudirá a la zona habilitada con mesas y sillas, en la que decide por sí mismo dónde va a sentarse y cuánto tiempo estará ocupando esa mesa. No hay turnos o reservas, como en los formatos de restaurantes o casas de comidas, en los que puede establecerse un control de las llegadas y un límite al tiempo de ocupación de una mesa.
¿Tienes más de 18 años?
Está a punto de entrar a un sitio web titularidad de B2B Partners SL cuyo contenido se dirige únicamente a mayores de edad. Para asegurarnos de que sólo es visible para estos usuarios hemos incorporado el filtro de edad, que usted debe responder verazmente. Su funcionamiento es posible gracias a la utilización de cookies técnicas que resultan estrictamente necesarias y que serán eliminadas cuando salga de esta web.
Lo sentimos
Tienes que ser mayor de edad para acceder a esta página web.